Santa María, en el corazón del Valle Calchaquí catamarqueño, presentó su propuesta turística de invierno bajo el lema “Sentí Yokavil”, una invitación a descubrir, o redescubrir, la esencia de la región a través de experiencias genuinas, multisensoriales y sostenibles.
La temporada busca no solo atraer visitantes, sino también potenciar el desarrollo económico local mediante el turismo, con impacto directo en prestadores de servicios, artesanos, guías, productores y emprendedores.
Una oferta diversa para todos los gustos
La agenda incluye desde actividades de aventura como trekking y rapel en los Cerros de Colores, hasta circuitos culturales, gastronómicos y astronómicos pensados para todo tipo de viajeros: familias, parejas, grupos de amigos y también turistas internacionales interesados en el patrimonio del norte argentino.
Entre los principales atractivos se destacan:
- El Circuito de Turismo Aventura, con salidas guiadas que aprovechan la geografía imponente del valle y dinamizan el trabajo de operadores turísticos.
- El Circuito de la Capia, que activa la economía local a través de panaderías, molinos y espacios culturales que celebran este producto identitario de Santa María.
- El circuito “Cantares de Luna y Tierra”, en homenaje a los hermanos Acosta Villafañe, que vincula tradición, música y memoria popular.
- El Observatorio Quilla Punco, que propone experiencias nocturnas únicas bajo el cielo del Yokavil, y los museos locales, como el Eric Boman y la Casa Abuela Rosalía, que promueven la historia viva del territorio.
- El Portal Paleontológico y la ruta “Ecos del Mar Perdido”, que suman valor geológico y científico a la propuesta turística, ampliando el perfil del visitante.
Sabores, eventos y cultura viva
A la experiencia se suman actividades como “Sentí Yokavil”, un recorrido gastronómico que parte desde una finca en El Cerrito, atraviesa molinos de especias y concluye con una comida tradicional elaborada con productos regionales como el pimentón, la quinoa y el maíz capia.
También destacan eventos especiales como el Coffee Rave (una combinación de café, música y pastelería), el Sunset Wine en la Bodega Puesto del Marqués, la ceremonia del solsticio andino en Fuerte Quemado y la tradicional Fiesta de la Capia, que cada año convoca a residentes y turistas en una celebración de sabor y música.
Con esta propuesta, Santa María refuerza su perfil como uno de los destinos emergentes del Noroeste argentino, apostando a una temporada de invierno que combine identidad, turismo y desarrollo económico local.
Tu opinión enriquece este artículo: